El trayecto arranca en la Fuente de los Leones, también conocida como de las Titas; y prosigue, durante aproximadamente unas dos horas, por la de las Granadas,
Batallas, Campillo, Gigantones en Bibrambla y la situada en la Plaza de la Trinidad.
Algunas de estas fuentes se concibieron para embellecer la ciudad, mientras
que otras fueron cambiadas de su ubicación original y han terminado en el lugar donde hoy las conocemos.